Entrevista al Bichi Fuertes.

"Si Palermo hace una película de su vida, yo hago un libro con la mía"A los 35, les sigue pasando por encima a las lesiones y a las defensas rivales: va por el gol 100 en Colón y ni piensa en el retiro. "No esperaba este presente".

Dicen que la vida de Martín Palermo es de película. ¿Y la del Bichi Fuertes?

-Parecida, jeje... Yo también viví muchas cosas buenas y otras malas en mi carrera. La verdad es que si con la vida del Loco se hace una película, con la mía se podría hacer tranquilamente un libro. Si me pasó de todo. Yo ni loco me imaginé que iría a vivir las cosas que me pasaron. Y menos en esta institución...

Esteban Fuertes sonríe a los 35 años y con 209 goles en el lomo: 91 de ellos los hizo con la camiseta de Colón. Los dos últimos se los metió a Racing. Inclusive el del nucazo con la complicidad de Migliore. Sonríe como cuando se dio cuenta de que ese gol era suyo. Sonríe distendido. Firma autógrafos. Abre la puerta para que se le note el corazón sabalero.

-¿Qué cosas te ocurrieron que no esperabas?

-Quedar tan marcado en Colón y ser el máximo goleador de la historia. Jamás.

-Encima tras una lesión importante como la tuya.

-No esperaba este presente. Para ser sincero, no. Uno se imagina hacer goles en la vuelta pero no este rendimiento. Ni yo ni la gente que me rodea lo esperaba.

-Como si no hubieras sentido la inactividad.

-Estuve ocho meses sin jugar, pero realmente no sentí el parate. Es que me impuse esta preparación como la última y la mejor. Por eso llegué bien y no sentí el cansancio.

-¿Te sirvió que fuera la segunda vez que te recuperabas de una lesión ligamentaria importante?

-Sí, bastante. Esta vez se me complicó los primeros 15 días porque tuve muchos dolores, pero fue totalmente diferente a la primera. A los cuatro días viajé a Necochea para estar con el plantel. En la anterior estuve una semana en cama sin poder moverme.

-¿Cuáles fueron los momentos más difíciles?

-Me gusta levantarme temprano, ir al gimnasio, compartir una hora de entrenamiento... No, lo más feo fue la primera semana tras la lesión. Se te derrumba todo.

-¿Pensaste en dejar?

-Al contrario. Me sentía con ganas. Estábamos peleando la Promoción y me moría por jugar. Por suerte ya pasó... Un 70% pensó que luego de eso vería un Fuertes arruinado. El otro 30 es gente que me quiere. Ojo, es normal, no soy un pibe y era la segunda lesión. Pero recibí el apoyo de muchísima gente. El presidente (Germán) Lerche, Leo (Astrada) y el Turco (Mohamed) fueron fundamentales. No soy un pibe y sin embargo todos me querían dentro del plantel. También los médicos y kinesiólogos se portaron muy bien.

-Fue clave la familia, ¿no?

-La contención de mi mujer, en las buenas y en las malas, y el cariño de mis hijos fueron fundamentales. La más chiquita (Paloma) me preguntaba de qué trabajaba y no sabía qué responderle. Ahora disfruta todo esto.

El Bichi sonríe. También de emoción cuando le llega el momento de hablar del pasado. De hacer un repaso rápido por esa vida de película... O de novela.

-¿Cómo te metiste en el fútbol?

-Con suerte. Estaba jugando la Liga del Sur, en Bahía Blanca, en el club Sporting de Punta Alta. Enfrentamos a Olimpo, en el Carminati, y fue a ver el partido gente de Independiente. Perdimos 6-1. Hice el gol y me preguntaron si quería tener una prueba...

-¿Siempre de 9?

-A partir de los 14 años. Antes era arquero, pero por suerte me di cuenta a tiempo, je. Era hincha de River y tenía de ídolo a Fillol. No era malo, me defendía muy bien pero el arco propio me fue gustando cada vez menos. Después pasé de 3, de 8 y por último de 9. Conozco todos los sectores de la cancha, nadie me puede decir nada, ja.

-¿Y tu infancia, Bichi?

-Relinda, no sobraba nada, tampoco faltaba; de 12 hermanos (siete varones) soy el sexto. Uno jugó en Platense, y en Ecuador pero pudo más la noche... je. Tiene 28 años. Mi vieja era empleada municipal, mi viejo de un campo. Ahora es transportista.

-¿Cómo fue haberte ido de Coronel Dorrego para recalar en Avellaneda?

-Un cambio grandísimo, totalmente distinto a un pueblo de 15 mil habitantes. Sufrí mucho. Antes de eso, lo más lejos que me había ido de mi casa era a 100 kilómetros.

-¿Fuiste a la pensión?

-Sí, estaban Laspada, Walter Boldorini y el Pampa Sosa.

-Jugaste un solo partido en Independiente.

-Sí, y en uno fui al banco. Estaban Pavoni y el Bocha Bochini de técnicos. Pero luego agarró Pedro Marcheta y trajo muchos jugadores. Pude haberme quedado, no me echaron, pero quería jugar y me fui a El Porvenir. Después volví a Independiente, pero me entrenaba en Tigre. El Beto Pascutti me pasaba a buscar todos los días con el auto pero finalmente no se llegó a un acuerdo. Y me fui a Los Andes, donde ascendimos al Nacional B. De ahí a Platense, un año, me compra y automaticamente me vende a Racing.

-¿Cómo fue jugar en Racing en años complicados para la institución?

-Muy difícil, muchos problemas. No cobrábamos nunca, había que aguantar apretadas de los hinchas... Eso que andábamos bien, llegamos a la semi de Libertadores con Basile. Fue en el club donde peor la pasé. Es feo estar meses sin cobrar, sin ropa para entrenarte, todos los días un problema nuevo. Eso desgasta mucho.

-Luego llegaste a Colón, pero en medio de una transferencia rara.

-Veníamos Claudio Marini y yo. Saralegui iba para allá, pero nunca sucedió. Habrá que preguntarle a (José) Vignatti (ex presidente de Colón) qué manejo hizo porque los tres estuvimos acá, ja. En el 99, después de dos años acá, estuve en Derby County de Inglaterra. Pero tuve problemas con los pasaportes y volví seis meses a Colón. No estuvo mal: salimos subcampeones y fui goleador. Y luego me venden a Francia (Lens). Muchas cosas en un año y medio...

-Luego te llegó el sueño del pibe...

-En los pueblos siempre se sueña con jugar en River o Boca... Fui a River y encima salí campeón. Era un grupo de muy buena gente y estaba Manuel Pellegrini, una persona espectacular. Había grandes jugadores: D'Alessandro, Cavenaghi, Demichelis, Mascherano, Maxi López.

-¿Te preocupa el momento actual de River?

-Ahora soy hincha de Colón, pero me duele el presente de River, porque tengo amigos allí. Ojo, por algo está último.

-¿Qué capítulo le estaría faltando al libro de tu vida?

-Tendría que tener un buen final, ¿no? Uno sería convertir los 100 goles con esta camiseta y dar la vuelta olímíca, claro.

-¿Y ser técnico?

-Hoy digo que no. Es una profesión muy ingrata. Mirá lo que le pasó a Leo (Astrada) en River. El más ganador de la historia como jugador se fue por la puerta de atrás como técnico, y eso que había salido campeón. Si me dicen que sea el técnico de Colón, hoy por hoy diría que no por el cariño que tengo con la gente. No me gustaría tirarlo en dos o tres meses. Sí me gustaría estar vinculado como manager, por ejemplo.

-¿Para cuándo el punto final del libro?

-No sé. Mientras tenga ganas de seguir... Mientras me sienta bien y no me cueste levantarme para ir a entrenar, no voy a escribir el final. Todavía no pienso en el retiro.

A FUTURO....

Dice que el objetivo del Sabalero es mejorar en el Cl 09 y entrar en algún torneo continental.

Pasaste por muchos lugares pero te quedaste en Santa Fe.

-Con el correr de los años me di cuenta que mi lugar es Colón. Venía de Racing y muchos pensaban que significaba un retroceso. Todo lo contrario. Al principio no era todo color de rosa, no era titular y me costó ganarme el cariño de la gente. Pero después...

-¿Por qué a Colón le cuesta tanto pegar el salto?

-No hay explicación. Algunos planteles están acostumbrados a convivir con la presión y luego te relajás cuando estás más aliviado. Quizás eso. O la comodidad de saber que cobrás siempre y que Santa Fe es una ciudad tranquila.

-Encima por acá pasaron técnicos de todo tipo...

-Claro. Mirá: el Coco Basile fue técnico en la Selección. Del Solar, en Perú. Martino, puntero con Paraguay. Bauza, campeón de la Libertadores. Y al Turco lo quieren todos los equipos. También jugadores que hoy triunfan en otros lados. La verdad, no encuentro una razón.

-¿Qué les pasó en este torneo?

-Estuvimos siete fechas sin ganar y no sabemos por qué... Por suerte después remontamos, el equipo fue otro y nos estabilizamos. Y si hacemos un buen Clausura quizás podamos entrar en alguna Copa. Ojalá...

cuando entedran q ya no quedan jugadores cmo vs bichi,los q saven un pokito de fut sabran de q ablo quien va a tenes es amor cmo vs xq la camiseta seria injusto el fut si no t da la chanse de ganar algo con los colers de tu eqipo de mi parte toy agradesido xq ya m da orgullo tens un jugador cn es jerarquia cmo vs...

BICHI MI GRAN IDOLO..VERDADER IDOLO